El período de convalecencia en casa será aproximadamente de 4 a 6 semanas. Algunas personas que realizan su trabajo sentadas pueden incorporarse a él en unas semanas, siempre que no realicen esfuerzos pesados antes de que haya transcurrido al menos mes y medio. Tu médico te indicará cuándo es el momento oportuno para reiniciar tu actividad laboral.

Si el trabajo que desempeñas es físico (requiere que levantes pesos, mucho movimiento, etc.), es importante que hables con tus compañeros para que en la medida de lo posible puedas rebajar el nivel de esfuerzo las primeras semanas y ellos te puedan ayudar en tu recuperación. Algunas personas no son capaces de reincorporarse a sus trabajos después de una operación de cirugía cardíaca, aunque hayan mejorado su estado general y hayan disminuido los síntomas. Si es tu caso, serás remitido por tu médico al servicio de rehabilitación cardíaca.

Una vez cicatrizadas las heridas, pasadas 3 o 4 semanas desde el alta y si no existe otra contraindicación, se pueden practicar relaciones sexuales sin inconveniente. No obstante, debes tener algunas cosas en cuenta:

Evita la actividad sexual:
– En circunstancias de mucho calor o demasiado frío.
– Inmediatamente después de las comidas, sobre todo si has ingerido bebidas alcohólicas.
– Si estás excesivamente cansado.
– Ante situaciones que propicien la aparición de ansiedad o estrés durante el acto (pareja nueva o desconocida, entorno desconocido, posturas que exijan un mayor esfuerzo físico).

Interrumpe la actividad sexual si:
Notas dolor torácico o dificultad para respirar. Si esto ocurre, consulta con tu médico, ya que puede ser necesaria la toma de nitroglicerina sublingual unos minutos antes de la relación sexual.

Si pretendes usar viagra o similares:
debes consultar antes con tu médico. Te explicará los posibles problemas que pueden surgir con esta medicación.

Trata de volver a tu actividad física normal tan pronto como sea posible. Aunque ya habrás empezado a moverte en el hospital, los primeros días en casa te cansarás bastante rápido. Esto es normal y no debe traducirse en pasarse todo el día sentado o tumbado. Es importante levantarse y caminar un poco (aunque sea solo por la habitación) al menos cada media hora. Poco a poco, intenta ir aumentando de forma gradual tu movimiento.

Te irás sintiendo mejor pasadas 6 u 8 semanas desde el alta.

Más información sobre actividad física y estilo de vida.

Sí, es posible. Analiza con tu médico qué medicamentos (si los hubiera) puedes necesitar, qué indicaciones debes seguir para tomarlos y qué tienes que tener en cuenta, especialmente si se te recetan anticoagulantes.

Más información sobre medicación anticoagulante.

El miedo a que un episodio de infarto vuelva a suceder es totalmente normal, pero es un temor que tiene su parte positiva. Te motivará para ser una persona más sana, disfrutar más del día a día y las cosas buenas que tienes en tu vida. Sin embargo, si ves que te cuesta controlar este miedo y te está generando estrés o ansiedad (que pueden ser dañinos para tu corazón), habla con tu médico y pide apoyo psicológico.

También te ayudará evitar las situaciones que te generen estrés y ocupar tu tiempo con cosas que te hagan sentir bien: aprende técnicas de relajación, haz ejercicio, socializa… verás que poco a poco superas el miedo.

Piensa también que, por suerte, la enfermedad del corazón está muy estudiada y su tratamiento muy avanzado.

Podrás viajar siempre que te encuentres bien y estable.

Si viajas en coche, recuerda que si no han pasado dos meses desde la intervención solo podrás hacerlo como pasajero en los asientos traseros libres de airbag y con el cinturón de seguridad (si es posible, coloca un pequeño cojín entre el cinturón y tu esternón).

Puedes viajar en otros transportes como tren o avión siempre y cuando te encuentres bien.

Unas 4-6 semanas si todo va bien. Tu médico te confirmará cuánto tiempo deberás llevarlo.

Si notas tu cicatriz diferente (roja, inflamada o se ha salido un hilo), llama a tu hospital y comunícalo. Te darán cita en el hospital de día para poder tratarte en un puesto organizado de enfermería y hacer una cura si es necesario.

Otros motivos de alarma.